Todos lo hemos vivido.
De repente, sin saber muy bien de donde viene exactamente, se empieza a sentir un malestar generalizado en la empresa.
Los cotilleos malignos se vuelven el pan de cada día, las quejas y el descontento se expanden como la pólvora y muchos empleados empiezan a poner al día sus páginas de LinkedIn y a consultar webs de empleo.
Se ha creado un mal ambiente de trabajo y hay que pararlo como sea para que no cause una huida masiva de talento y la productividad se desplome a pasos agigantados.
¿Pero cómo evitarlo? ¿Cómo pararlo a tiempo?
Lo primero que tienes que averiguar es por qué se ha creado esa negatividad en la empresa antes de buscar soluciones.
Causas de que se produzca negatividad en la empresa
Según este estudio llevado a cabo en EE.UU y Canadá en el que participaron más de 1.000 empleados y 300 profesionales de los RR.HH, las causas más comunes del mal ambiente de trabajo son estas:
Una carga excesiva de trabajo
Cuando un empleado se va y se reparten sus tareas entre los demás compañeros, si estos no ven una fecha clara de cuándo la situación va a cambiar, es decir, cuándo se empleará a otra persona que sustituya a la que se fue, se producirá negatividad.
Porque los empleados están trabajando extra sin que sus salarios lo noten y por lo tanto la situación creará un malestar generalizado que se irá acrecentando a medida que pasa más tiempo.
En este caso además de la solución obvia de emplear a otra persona lo antes posible, también se pueden crear listas de tareas que son prescindibles para así aliviar la carga de trabajo del equipo hasta que se contrate a alguien nuevo.
Preocupación sobre el futuro de la empresa
Las empresas pasan por baches y los empleados lo notan.
Cuando estos perciben que los directivos no están llevando la empresa a buen puerto temen por su futuro y entonces se produce malestar, una bajada de la productividad y pérdida de empleados.
En este tipo de situaciones lo mejor es mantener una comunicación activa e informar a los empleados de la situación de la mejor manera posible. Qué medidas se están tomando, qué es lo que pueden hacer ellos para mejorar la situación, etc.

Falta de retos y aburrimiento
Cuando los empleados sienten que están desarrollando una actividad muy por debajo de sus capacidades se aburren y es entonces cuando la negatividad aparece.
Es importante que los jefes de equipo tengan conversaciones habituales con los empleados e identifiquen oportunidades de crecimiento y desarrollo.
Falta de reconocimiento
Todos necesitamos ser reconocidos por nuestros logros. Y no solo económicamente, sino también emocionalmente. Unas palabras de elogio sincero en público pueden también motivar enormemente a una persona.
Pero también lo contrario influye.
Cuando se reconoce económicamente a una persona de manera injusta esto puede crear un malestar en el equipo debido al sentimiento de injusticia.
Mucho cuidado con reconocer a personas especialistas en dorar la píldora a la persona que tienen por encima.
En estos casos una evaluación de 360 grados es mucho más segura. Este tipo de evaluaciones son hechas tanto por empleados al mismo nivel como por debajo del evaluado.
Carga de trabajo mal repartida
Esta es una de las causas que más se da en las empresas y que se puede evitar más fácilmente solo observando.
¿Empleados que tienen mucho tiempo para tomar cafés y charlar?
¿Otros que no se levantan de la silla y están estresados?
Es cierto que no todo el mundo tiene el mismo nivel de productividad y alguien puede terminar la misma tarea en mitad de tiempo con la misma calidad.
Es entonces cuando hay que mirar si esa persona está realizando tareas muy por debajo de su potencial o si la carga de trabajo está mal repartida en el equipo y entonces reequilibrarla.
Hemos visto las causas más comunes de que se produzca un mal ambiente de trabajo y hemos ya hablado de algunas formas de evitarlo, pero ahora vamos a ver otras formas que también funcionan para minimizar la negatividad en la empresa.
Consejos para evitar el mal ambiente de trabajo
Más Autonomía
Los empleados necesitan sentir que tienen poder de decisión e independencia para tomar sus propias decisiones. Así se les demuestra que confías en sus capacidades y por lo tanto se trata de una forma más de reconocimiento.
Oportunidad de dar su opinión
Todos necesitamos ser escuchados y tenidos en cuenta. Cuando das la oportunidad a tu equipo de dar su opinión ganáis todos.
Evita las injusticias
Por ejemplo, no crees nuevas reglas para todos si solo son unos cuantos quienes están haciendo algo mal.
Trata de ser justo con todo el mundo y evita los favoritismos.
Crear oportunidades para crecer
A veces no es sencillo crear nuevos puestos de la nada, pero puedes motivar a tus empleados con formación o con nuevas responsabilidades que supongan un reto para ellos.
Recompensa el trabajo bien hecho
Aunque haya sido siempre el argumento por excelencia a la hora de contratar “Si no lo haces tú hay otros mil que pueden hacer este trabajo” en realidad sabes que no es cierto.
Porque no todo el mundo trabaja igual de bien ni tienen un carácter igual de fácil.
Valora a tus buenos empleados y recompénsalos para que no se vayan.
Sé un verdadero líder
Enseña el camino y explica el destino y tus empleados caminarán con paso más ligero y seguro.
Si les das la información que necesitan tomarán mejores decisiones para tu empresa y te llevarán a ti y a todos más rápidamente a destino.
Introduce el mindfulness en tu empresa
Muchas empresas ya han integrado el mindfulness en su día a día con resultados muy positivos.
Todas estas empresas han visto aumentar la productividad y la motivación de los empleados.
Son muchísimos los beneficios de practicar mindfulness en la empresa, estos son solo algunos de ellos:
- Reduce los niveles de estrés
- Mejora la comunicación entre los compañeros
- Aumenta el nivel de concentración
- Mejora la autoestima
- Aumenta la satisfacción laboral
- Ayuda a encontrar sentido en la tarea
Y todo esto contribuye a crear un buen ambiente de trabajo donde las personas se ayudan y discuten ideas sin atacar a sus interlocutores ni querer tener razón a toda costa.
Llevo muchos años formando equipos en el mindfulness y cada día recibo feedback muy positivo.
A veces ni los propios jefes de equipo pueden creer el cambio que se ha producido en el ambiente y en la productividad.
En la empresa de Luis al principio se tomaban mis sesiones de mindfulness para equipos como una tarea más.
Pero tras la segunda sesión esto es lo que Luis me dijo:
“Antes se lo tomaban como una obligación, ahora están deseando que llegue el día de la sesión contigo”.
Y tras unas semanas de trabajo con el equipo Luis me comentó:
“Ahora la gente es capaz de decir lo que no les gusta de una manera más amable. Han vencido el obstáculo de decir lo que no va bien, que es muy importante, pero sin llegar al extremo de acumulación de emociones para decirlo de mala manera. Se nota que la gente reflexiona a la hora de tomar una decisión o una cuestión que puede implicar a otros. La gente está más tranquila y se trabaja mucho mejor”.
Si crees que tu equipo está desmotivado o estancado en la negatividad, os puedo ayudar a sacar lo mejor de cada uno para que seáis un equipo invencible.
Para más información sobre mis programas de coaching y mindfulness para equipos envíame un email a: hola@irenepachecoach.com.